Después de un amplio debate con el equipo de redacción, decidimos inaugurar este blog contándoles sobre el multi-asalariado Hugo Vazquez: Empleado municipal, Secretario General del Sindicato Municipal, Secretario General de la Federación de Empleados Municipales de Entre Ríos, Diputado Provincial, y hasta hace poco, Director del IOSPER.
Según nos cuentan fuentes allegadas a este señor, habría comenzado su carrera sindical como delegado de la Dirección de Alumbrado Público con el fin de evadir un sumario iniciado por el ex Intendente Moine.
La cosa es que, al contrario de los que muchos piensan, Vázquez es Radical y en calidad de tal estuvo al frente de una medida gremial ilegal que merecía una reprimenda administrativa (parece que existen reglas para reclamar, como no destrozar bienes del Estado).
Así inició su impresionante carrera, logrando mejoras para sus compañeros de trabajo tales como el pago – vigente a la fecha - de tres pesos la hora extra (¡huy¡ ¡perdón el error! Eso fue en el año 1990, fecha en que todavía era delegado).
Su inteligencia es algo de lo que no existen dudas, alcanza con preguntar a los intendentes que se ha “comido”; quienes recién se enteraron al perder las elecciones cuando, en la calle, les gritaban: ¡sorete! (que es en lo que todo lo comido se transforma).
Bueno, el tema es que este muchacho, mantenido con el dinero de los contribuyentes entrerrianos, hace dos años que está construyendo su “casita”, junto a la de otro “colega” (que empieza con ALL y termina con ENDE).
Si señores, dos años ininterrumpidos de construir y construir. ¡Flor de ranchito debe estar haciendo en Sauce Montrul! (por si la quieren visitar, está en calle Epifanio Martínez, a 20 km de la Capital enterriana)
¡Si es una humilde casita! Dijo Vazquez, mientras supervisaba a los empleados municipales que instalaban frente a su Casa Quinta las farolas que antiguamente iluminaban una avenida paranaense.
¿Por qué utilizaron vehículos Oficiales y obreros de la municipalidad de Paraná para hacer este trabajo? Preguntó temeroso el periodista, a lo que el político/gremialista contestó - mientras se rascaba el ombligo y se olía distraídamente los dedos: Son amigos que se ofrecieron gentilmente a hacerme el laburito y esos camiones son míos; es que por una cuestión de nostalgia los pinto así, para no sentirme lejos de mi ciudad.
Se dice por ahí que ésta no es la única propiedad del Hugo. Cuenta nuestra fuente que luego de que el SUOYEM participara de una marcha en tiempos de Montiel - misma en la que la Puerta de la Casa Gris entró en combustión espontánea - el viejo gobernador lo llamó y le entregó un barrio completo del IAPV para que reparta entre quien él quisiera (en las planillas de adjudicación del Mosconi II se leen apellidos reconocidos allegados - muy allegados - al Hugo).
La cuestión es que después de esa marcha, nunca más se vio al Sindicato Municipal reclamar contra el viejo patrón de estancia. Es más, cuentan que desde el lunes siguiente a la quema de la Puerta, en el Playón de Casa de Gobierno, aún persisten algunos compañeros de ATE, sucios, con sus pelos largos y ropas raidas, pidiendo moneditas, esperando a que llegue la columna del SUOYEM. "Ya van a llegar, ya van a llegar" repiten entre dientes.
20 jul 2009
19 jul 2009
CHUSMEAR PARA HACE JUSTICIA
Si mis queridos descamisados, chusmear es una manera de hacer justicia.
¿Qué podemos hacer contra esos que nos meten la mano en el bolsillo, que nos piden coimas, que pretenden cogerse a nuestras mujeres para darnos trabajo, que se comen toda la torta y no reparten nada, que nos chupan la sangre?
¿Qué hacer si son impunes ante la Ley y encima, si los denunciamos nos terminan haciendo la vida imposible?
¡Podemos deschavarlos con el nunca bien ponderado chisme!
Si. Con EL CHISME, QUE ADEMÁS DE SE DIVERTIDO ES JUSTICIERO.
El silencio es cómplice de la impunidad:
¿Qué podemos hacer contra esos que nos meten la mano en el bolsillo, que nos piden coimas, que pretenden cogerse a nuestras mujeres para darnos trabajo, que se comen toda la torta y no reparten nada, que nos chupan la sangre?
¿Qué hacer si son impunes ante la Ley y encima, si los denunciamos nos terminan haciendo la vida imposible?
¡Podemos deschavarlos con el nunca bien ponderado chisme!
Si. Con EL CHISME, QUE ADEMÁS DE SE DIVERTIDO ES JUSTICIERO.
El silencio es cómplice de la impunidad:
- ¿Un Inspector de Tránsito te coimeó? CONTANOS.
- ¿El médico es un ratón que roba los recetarios del hospital y los lleva a su consultorio privado? DECILO.
- ¿Tu jefe hizo una “fiestita” en su despacho? COMPARTILO.
!VAMOS A DIVERTIRNOS Y HACER JUSTICIA¡
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